SANTIAGO PAZOS
ES MIMO, ESTÚPIDO
(SOBRE ZIC – ZAG)
Al igual que en aquella famosa frase de las elecciones americanas entre Clinton y Bush padre sobre la economía, Joseph Collard nos insistió constantemente que en la mímica todo es imaginación, ilusión, pura fantasía elaborada con inteligencia. Una y otra vez arengaba al público, interaccionando y provocándolo, para poder repetirle: "es mimo, estúpido".
He de señalar que a mí, por reiterativa, la mímica me divierte lo justo. Un inconveniente personal que no me impide reconocer que los profesionales del gesto tienen grandes dosis de creatividad y una elegancia en los movimientos que admiro. Su capacidad para crear objetos, situaciones y espacios complejos, en y desde la nada, encandila a cualquiera cuando son originales y dominan el oficio.
Es el caso de este hombre solo que, como un especializado conferenciante, impartió una sencilla clase de introducción a la mímica utilizando su trayectoria vital y profesional como referente. Para que entendiésemos mejor la lección tuvo que recurrir, quizás con cierto exceso, a la palabra entre gag y gag, pero solo para ayudarse en la explicación, no por incapacidad gestual o falta de imaginación expositiva.
Las situaciones cómicas que produce sin ningún alarde, ni técnico ni pirotécnico, nos introducen con facilidad en esa realidad inventada e inventariada que es el mundo de la mímica. Su último sketch es prodigioso, partiendo de un saludo, al ritmo de música clásica, crea un círculo progresivo – regresivo perfecto con el que termina, volviendo sobre sus gestos sin saltarse un solo movimiento, diciendo adiós.
Después del fiasco de Sezuán, el agradecido público de Carballo relajó su cuerpo y sus mandíbulas para disfrutar de un espectáculo cómico, desenfadado y entretenido, que puso el punto final a un FIOT 08 variado y de calidad.
